Gunkimono viene a significar cuentos de guerra en japonés, y es de
lo que supuestamente trata, nos vamos a poner en el papel de generales
japoneses para mover nuestras tropas en los campos de batalla y conseguir, bien
puntos de honor o bien puntos de victoria.
Y decimos supuestamente porque aquí
si que nos encontramos ante un juego bastante abstracto, sin que esto merme el
disfrute de la partida.
Bien, vamos a manejar nuestros ejércitos
en los campos de batalla. Esto significa que el tablero representa el campo de
batalla en el que se van a posicionar nuestras tropas, tropas que vienen
representadas por losetas con los cinco diferentes tipos de tropas que hay. Si,
hay cinco tipos de tropas, y, aunque vienen con diferentes dibujitos según la
tropa, nos vamos a referir a ellas según su color (amarillas, azules,
verdes...). Y estas tropas vienen ya dibujadas en el tablero y vienen en las
losetas que vamos a tener como jugadores, ya que hay losetas con dos tipos
diferentes de tropas, y unas losetas únicas para toda la partida con una sola
tropa, pero una de cada color que tendremos para dos usos diferentes.
Y dicho esto casi podemos decir
que tenemos explicado el juego. En el turno de cada jugador va a colocar una de
las losetas dobles, o una de las losetas individuales. La única regla de colocación
es que no se puede colocar un tipo de tropa sobre otro tipo de tropa, y que hay
que respetar las alturas, es decir, no podemos dejar una loseta colgando por
uno de sus lados.
Que más decir a este respecto,
creo que con decir que las losetas individuales las podemos usar boca abajo
para suplir la falta de altura, y que las fichas van a ir colocándose más alto
esta toda la mecánica dicha.
Solo queda decir unas menciones
sobre el tema de puntuación. En este juego hay dos tipos de puntuación, la de
puntos de victoria que nos dará la victoria, y la de puntos de honor que nos va
a dar beneficios y formas muy suculentas de puntuar. Así que diremos que, cada
vez que se coloca una loseta vamos a puntuar por los dos tipos de tropas que
hay en la loseta colocada (por una sola si es una loseta individual la que
colocamos).
Cada loseta tiene dos tipos de
tropa, que ya hemos dicho, y unos simbolitos de fortalezas que representan los
puntos de honor de esa tropa. Cada loseta tiene una tropa con un símbolo de
honor y otra con dos.
Pues al colocar la loseta
decidimos ganar puntos de honor con ese tipo de tropa según los iconos de la
ficha que hayamos colocado, o decidimos ganar puntos de victoria, entonces
tenemos que ver la formación que esa tropa ha conseguido hacer en el tablero,
es decir, cuantas tropas de ese mismo color hay adyacentes en el tablero, dando
igual la altura, y eso son los puntos de victoria que ganaremos.
Pues ya tienes el juego
explicado, de eso trata Gunkimono, un juego con muy poco tema, con unas reglas
muy sencillas pero que se convierte en un juego muy ágil, muy divertido y con
mucha maldad.
Cada turno vas a tener que
decidir por que vas a puntuar, si decidimos puntuar puntos de victoria será
bueno que juntemos una formación muy grande, dejándoselo caliente al siguiente
jugador, o será mejor que puntuemos menos, pero cortemos esa formación tan
grande de la que se están aprovechando los demás.
Pero ¿y si decidimos puntuar
por honor? ¿Y para que sirve el honor? Esta parte es muy importante, cada vez
que puntuamos honor vamos subiendo en un track según el tipo de tropa con la
que consigamos ese honor. En el momento que llegamos arriba en el track
ganaremos una ficha de puntos oculta, de las que hay tres en cada tipo de
tropa, yendo los puntos de más a menos (el primero conseguirá entre 11 y 15
puntos, mientras que el tercero conseguirá entre 3 y 6). Pero no solo eso, si
conseguimos ser honorables con todas las tropas, nuestro status nos permitirá
colocar una fortaleza en el tablero, fortaleza que hará que podamos dirigir más
cómodamente una formación en el tablero, es decir, que vamos a tener una formación
que nos va a dar puntos todos los turnos coloquemos o no losetas en ella, y
eliminando la posibilidad de puntuar a los demás por esa formación.
Lo dicho, coloco mi loseta y
que hago con ella... voy a por esos puntos de honor que necesito para llegar
arriba del todo y dejo de ganar unos puntos de victoria muy ricos, o me voy a
por la fortaleza. Hago que esa formación sea más grande y me de muchos puntos,
pero se la dejo a huevo para la fortaleza del otro que la tiene en la mano y
lista para colocar...
No solo las decisiones sobre
que hacer con la ficha que vas a colocar para puntuar, sino también lo que te
conviene fastidiar a los demás. Si tenemos a un jugador con una fortaleza
ganando muchos puntos con una formación muy grande... igual nos viene bien
colocar unas tropas de otro tipo por el medio, ganar el honor correspondiente y
dejar que su formación deje de dar tanto por saco.
¿Decíamos que no tiene tema?
Realmente no lo buscamos en este juego, buscamos esa agilidad de juego, esa
maldad, esa sencillez de reglas y el gran rato de diversión. Las partidas no se
deberían de ir mucho más allá de una hora, con una interacción bestial, sobre
todo al cortarle las formaciones a los demás.
Y una pequeña mención sobre las
losetas individuales, de las que todos los jugadores tienen una de cada color
al principio, y que no se reponen. Se corre el riesgo de no utilizarlas por miedo
a quedarte sin ellas y no mover las losetas que tienes. ¿Y? ¿Acaso no están
para ello? Si necesitas colocar una loseta doble que te va a dar muchos puntos,
pero resulta que no está todo al mismo nivel... nada, coges una de tus losetas
pequeñas y la colocas boca abajo, no solo permitiéndote colocar tu loseta doble
megabestial, sino que además rompes la regla de no poder colocar una tropa
sobre otra.
¿Que tienes un jugador
recibiendo una bestialidad de puntos con su formación? Nada, colocamos una
loseta individual rompiéndole la formación, y encima conseguimos los puntos de
honor (estas traen siempre dos puntos) que tanto necesitamos para llegar a
nuestra fortaleza o a esa puntuación tan rica arriba del track.
En resumen, grandísimo juego.
En diez minutos lo tienes explicado y estás pensando donde colocar las losetas,
se entiende muy rápido y en seguida estará todo el mundo pensando en hacer el
mal.
Si he oído que se puede dar un
aire al Tigris y Eufrates, bueno, porque colocamos losetas y hacemos formaciones
del mismo color para puntuar, por esa parte si.
Y si queremos ponerle un pero,
le pondremos el tema de pensar donde colocar tu loseta, puede que haya gente
que se pare mucho a pensarlo, aunque no lo veo como un juego propenso al Análisis
Parálisis, si que puede que haya algún jugador que se pare a ello... nada, se
le mete un empujón y listo, a seguir colocando losetas